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LA INICIACIÓN ROSACRUZ

POR: V.M.OM YEOWAMS OM

La Iniciación es algo sagrado, sublimemente divino y para hablar de ella se requiere mucho valor.
El gusano racional se solazará y hasta reirá atribuyendo el presente capítulo al fruto de las elucubraciones calenturientas de mentes fantasiosas, ilusas y subjetivas.

Sabemos, y conocemos hasta la saciedad, como reacciona el animal intelectual ante las sagradas realidades del alma.
Al hablar de la INICIACIÓN, empezamos por descorrer el velo que cubre los albos misterios que intrigaron a muchos sedientos y sinceros buscadores de la verdad, así como a los profanos y profanadores que osaron abrir las puertas del misterio. Quienes se encaminaron en él, lograron arrebatar, de las garras mismas del diablo, eso que es el Fuego Sagrado.

Un diccionario nos dice que INICIAR es “admitir a uno en la participación de una ceremonia o cosa secreta; enterarle de ella, descubrírsela, instruir en cosas abstractas de alta enseñanza. Recibir las primeras ordenes u ordenes menores”.

En conformidad a esta definición dada por el diccionario, vamos a “iniciaros” lector. Vamos a enteraros de muchas cosas que en todos los tiempos se mantuvieron secretas y solo era posible su comunicación a quienes habían pasado por una serie de obstáculos y vencido las múltiples pruebas que encontraron en el sendero. Vamos a instruiros en las divinales cosas que son realmente “alta enseñanza”, vamos a hablaros en torno a la INCIACION.

Ante todo, es necesario que os des cuenta que VOZ sois tan solo una criatura humana, un gusano racional, una bestia que se arrastra en el fango del intelectualismo, un puerco que se revuelca en la alcoba de la fornicación.

Es urgente que hagáis conciencia, VOZ quien podéis llamaros Jackeline Anderson Laneuville, María Pérez López o Calixto Mamani Jancko; que hacéis gala de poseer títulos nobiliarios y os jactáis de que en vuestras venas corre sangre azul y que sois de la más rancia nobleza…en realidad: No sois más que una triste sombra que el tiempo disuelve en la boca siniestra de la tumba.

Es urgente que hagáis conciencia de que no sois más que un triste fantasma que presume tener existencia real.

Vos no sois más que un conjunto trino de materia energía y ego. Por tanto, como materia, energía y ego, no podéis recibir ninguna INICIACIÓN.

El ego no recibe ninguna INICIACIÓN.

Las INICIACIÓNES LAS RECIBE EL PADRE quien mora en secreto. El ego tiene por destino el abismo, la desintegración.

El adorado Ego no pasa ninguna de las pruebas a las que son sometidos los verdaderos aspirantes a la ROSA y la CRUZ.

Todas las dificilísimas pruebas e INICIACIÓNES SAGRADAS son cosas intimas de la CONCIENCIA, no del Ego. Son ceremonias sagradas a las que asiste el PADRE. El ego está ausente de ello, el ego sigue en su lecho de placeres, vicio, degeneración, dinero, pereza, etc.
Toda criatura racional es un trio de materia energía y ego. Dentro de eso que es materia consideramos a los distintos cuerpos protoplasmáticos que posee, tales como el cuerpo vital, astral, mental, causal. Por energía, a las diversas manifestaciones y modalidades energéticas provenientes de cada cuerpo, asi como de las eminentemente egoisticas; y por ego a todo ese asqueante conjunto legionario de yoes cada uno mas maligno que otro, mas cruel y perverso que otro.
De todo esto que posee el animal racional, nada puede ser digno de ser sometido a las Pruebas Cósmicas de la INICIACIÓN.
El EGO no recibe ninguna INICIACIÓN, ni es sometido a ninguna clase de pruebas que le preparen para la Sagrada Ceremonia. Sin embargo, muy dentro en las mazmorras del intelecto, en esa funesta cárcel preparada por el Ego, se halla DIVINAL ESENCIA, la CONCIENCIA, el BUDHATA.
Lo único divino que poseen los homúnculos racionales, es ese principio anímico que se llama BUDHATA o CONCIENCIA.
Es el BUDHATA que, siendo liberado por el PADRE, participa junto al Señor de las Perfecciones, de las sagradas pruebas y de las más augustas INICIACIÓNES.
Muchos aspirantes a la Rosa Cruz suenan con la INICIACIÓN. Quienes suenan con la INICIACIÓN, jamás alcanzan esas inefables cimas.

Para lograr la INICIACIÓN, no hay que sonar, hay que trabajar.
La INICIACIÓN, cuesta lágrimas de sangre, cuesta paciencia y serenidad jobiana.
La Iniciación no es cuestión de realizar maromas de circo o de recibir certificaciones iniciáticas por x y dólares.
La INICIACIÓN autentica, la Verdadera INICIACIÓN en los Misterios de la Logia Blanca en los Templos de la Rosa Cruz está reservada solo al Intimo, al Padre quien mora en secreto.
La Iniciación no es para la persona, no es para la personalidad, ni para el ego.

El ego no recibe ninguna INICIACIÓN Blanca.

El ego tiene por destino inevitable: El Abismo.

Aquellos que pregonan ser iniciados de la Logia Blanca, son simplemente puro Ego, y como tales simplemente “charlatanes”, impostores , o delincuentes.

La INICIACIÓN es algo muy sagrado…muy sagrado.

A la INICIACIÓN Blanca, solo llegan los castos, recordadlo muy bien. Solamente quienes viven en castidad muy bien entendida llegan luego de bastante trabajo hasta el Ara la INICIACIÓN. Ningún fornicario recibe Iniciación Blanca. Es obvio, cualquier ente, por más abyecto que sea, puede aspirar y lograr una iniciación negra.

Las INICIACIÓN es en la Logia Negra, están reservadas a los fornicarios que realmente saben fornicar.

Los fornicarios comunes y corrientes, vulgares o babosos, no sirven sino para leña del averno. La vulgaridad bestial de las fornicaciones del animal racional no lleva sino a convertirse en estiércol de los establos abismales. No es un cualquiera un Iniciado de la Negra Logia, es alguien que sabe fornicar.

El Iniciado de la Logia Negra es simple y llanamente el Ego, lleno de sutil maldad y de chispeante intelectualidad.

El Iniciado de la Logia Blanca, es Iniciado por haber conquistado la castidad, por haberse impuesto contra la fornicación. Es real y verdadero Iniciado de la Blanca Logia es EL INTIMO.
Son muchas las pruebas a la que es sometido el candidato a la INICIACIÓN.
Bástenos hacer presente las terribles asechanzas de los guardianes del Umbral… ¡Terribles!
Un remolino de violentas pasiones surgen agresivas ante la manifestación maligna del horrendo guardián del plano Causal… No hay palabras que nos permitan expresar la terrible y épica batalla contra la perversidad del ego en el plano Causal…

Tenemos presente las constantes pruebas elementales presentadas por sus genios pertinentes:

  • Las pruebas del elemento Tierra.
  • Las pruebas del elemento Aire.
  • Las pruebas del elemento Agua.
  • Las pruebas del elemento Fuego.

Todas tan sutiles y majestuosas que, sin el auxilio de la Bendita Madre Cósmica, sin la ayuda constante del Bien Amado, no hubiese sido posible salvarlas.

Pruebas y más pruebas…

Cada grado conquistado era simplemente el pago a nuestros propios triunfos sobre la adversidad.

Las iniciaciones no se compran ni se venden, son el pago a la obra realizada en el Ara del Padre.

AUM