Un Maestro no es un cortesano de las religiones, es su JUEZ. Ser el cortesano de las religiones es aún más vil que ser cortesano del capital.
El MAESTRO no sigue las enseñanzas de tal o cual religión. El MAESTRO las ha conocido, las conoce, las ha vivido, las ha experimentado.
Los incapaces de experimentar la verdad buscan una “ciencia”, una filosofía, un arte o una “religión”. Eso resulta doméstico, persiguen la virtud de los comodines, de los amancebados. Son ofrendas para la muerte.
El MAESTRO no sigue la letra muerta de las escrituras sagradas, al contrario, las vive…
El verdadero MAESTRO no sigue a ninguna religión. El Maestro conduce, guía y orienta a los religiosos. Es un hombre superior, va mas allá del tiempo, del espacio y más allá de la eternidad.
Al Hombre lo han hecho los DIOSES. EL MAESTRO se hace en DIOS. EL MAESTRO ES UN DIOS. DIOS ES EN EL MAESTRO.
La estrella de Belén anuncia el nacimiento del MAESTRO.
No hay contradicción posible en los Maestros de conciencia DESPIERTA, ellos SON LA VERDAD. EL VERBO de sus labios es luminoso, ígneo, tangible, real; podrá decapitársele cual JUAN EL BAUTISTA fue, más en ELLOS continuara el verbo.
El MAESTRO ES antes de su tiempo, ES en su tiempo y va mas allá de su tiempo, se adelanta en ciencia a los siglos y en conciencia a los milenios. Es por el MAESTRO que se orientan los iniciados y por ÉL se guían los aspirantes a la LUZ y a la VERDAD.
YEOWAMS OM= Juan
VERBO QUE REALIZA= Verbo hecho carne
ROSACRUZ= verbo hecho hombre
EL MAESTRO= el Hombre
El ROSACRUZ es fruto de múltiples purificaciones, incesantes reflexiones, angustiosas pruebas y sobrehumanos sacrificios.
El ROSACRUZ es sólo en el tiempo y la eternidad, y va mas allá del tiempo y de la eternidad… No como un borrego sino como lumbrera ante la cual se descubren reverentes las almas sedientas de Luz. Su palabra es mensaje de guerra y soledad, y hacia ÉL se orientan los escogidos, y van pisoteando calenturientos cráneos de multitudes, de cerebros sin luz.
Verbo que manda, palabra que obedece: HACER LA VOLUNTAD DEL PADRE. Suprema y máxima universal que hace florecer el Verbo fecundo de sus labios hecho carne, hecho fuego, hecho LUZ.
¿Quién es Juan? Juan es un HOMBRE tan sólo, un hombre que sufre, calla y ama; un hombre cuya conciencia de amor se inflama. Jun es un HOMBRE cuyo nombre dice todo y dice nada.
¿Quién en el Maestro? ¿Qué es un Maestro? El Maestro…Un MAESTRO…ES JUAN, cuyo verbo, fecundo como simiente divina, siembra en las conciencias dormidas el germen de un Despertar.
JUAN…EL VERBO…YEOWAMS OM.
El Verbo es Vida…Teorías son muerte, la vida se traduce en los HECHOS. Las teorías tienen sus tumbas: las bibliotecas.
Los hechos cristalizan en OBRAS. La realización íntima, en y cada uno de los aspirantes al cetro, será obra de sus íntimos esfuerzos.
YEOWAMS OM: El Desconocido.
¿Quién puede reconocer a un Maestro del Fuego? El Maestro Es, las multitudes no lo conocen, ni lo aceptan…Y eso… ¿Qué a las conciencias?
¿Qué al Maestro? ¿Qué a los Dioses?
¿Cómo podríamos presentar al Maestro? El Maestro ES.
¿Cómo podríamos prologar la enseñanza de la Logia Blanca?
El Maestro es, y la enseñanza hay que vivirla. La enseñanza vivida no necesita de prólogos.
El Fuego y la Luz no necesitan de prólogos.
El símbolo de la Rosa y la Cruz encierran el fuego y la Luz divina cuyo calor y luminosidad sólo pueden ser vividas en la práctica, y de la praxis a la realización va el valiente hacia EL MAESTRO INTERNO.
Todo real aspirante a la Iniciación debe buscar a su DIVINO PADRE QUIEN MORA EN SECRETO. La búsqueda se inicia con la aplicación práctica de la sabiduría esotérica de la Orden Rosacruz.
Fdo.: V.M. “OM”
Después de muchos años... de ¡Veinte largos años...! Nuevamente, junto a mi gran amigo Juan. Veinte años de lucha constante en si y contra si mismo han hecho de Juan, de IEOUAMS, un Maestro singular, con Fuego y Luz diamantinas dimanantes de las entrañas incognoscibles de eso que es lo Sagrado, lo Inefable:
La Divina MAIA
RAM - IO
ISIS
LA DIVINA MADRE CÓSMICA
Veinte años calendarios me separaron de aquel aguerrido y valiente guerrero que vencía junto a su discípulo y Maestro, la voracidad ígnea de las lavas hirvientes de un activo volcán, y en la soledad hermitaña de su vida trascendente, vencía el volcán de sus pasiones muy humanas y también sub-humanas, mostrándose cada vez más HOMBRE, más ANGEL, todo un DIOS, sin embargo, todo un ser humano, muy humano, demasiado humano para ser comprendido por la voraz jauría que, esclava de sus nefastos vicios es incapaz de percibir, siquiera por un instante, la grandiosidad de YEOWAMS OM, quien nuevamente, un día 27 de marzo, el primero de este amargo milenio nace del ubérrimo y sacrosanto vientre de la Madrecita Cósmica, como un Maestro Exaltado y coronado con la gloria de los dos veces nacidos, con las glorias divinas del OM.
Juan, YEOWAMS OM, se ha transformado en OM YEOWAMS OM. La Orden Blanca nos permitió asistir al grande ágape cósmico que se realizó ahí dentro, en el silencio de la vida sin fin, donde OM YEOWAMS OM fue ungido con un indecible grado, y se coronó con las dos diademas ígneas del OM.
¡Salve hermano y amigo...!
¡Honor y Gloria Maestro OM YEOWAMS OM!
Vuestro discípulo:
"OM"
Fdo. V.M. "OM".
Nota: Nuestra alegría es grande... Dos Maestros de la ORDEN ROSACRUZ ante nuestros todavía asombrados ojos, cruzaron las barreras del tiempo y espacio para fundirse en un abrazo de Fuego Y luz: El Venerable Maestro OM YEOWAMS OM y su discípulo, y amigo, y hermano: el Venerable Maestro OM.
Dos grandes seres, ancianos y niños, observaron el resultado de esta página que, tenemos la esperanza, llegará a miles de buscadores de la verdad divina.
LOS EDITORES
OM YEOWAMS OM, corresponde al nombre Intimo, místico u oculto del Atman Divino de quien es conocido como el ciudadano Juan Santa Cruz Torrez.
Nació bajo singular tormenta un 27 de marzo, en una choza de piedra, a unos cinco mil metros de altura sobre el nivel del mar, en una solitaria cumbre de un olvidado cerro, conocido por los Sabios de la Rosa y la Cruz, como la Montaña Negra. Sus dos primeros años soportaron el gélido frio, enfermando, y restableciéndose sin auxilio médico alguno. Sus juegos eran los que la soledad y unos cuantos animales domésticos permitían, hecho esto que permitió una continuidad de aprendizaje de bases eminentemente esotéricas.
Desde los tres años vivió en la "ciudad más alta del mundo" transcurriendo sus años previos a la escuela dentro de una gama diversa de manifestaciones eminentemente paranormales, entre las que podemos indicar:
- Constante comunicación con la naturaleza elemental.
- Frecuentes desapariciones inexplicables de la casa paterna.
- Sus juegos infantiles se desarrollaban dentro de la normalidad, pero en dos, tres o más lugares a la vez, hecho que sobresaltó a algún familiar y también a sus pequeñas amistades.
- Su pasatiempo era imitar la pasión y muerte de Jesús en la cruz.
- Clara inteligencia, le permitió reconocer muy temprano, que, si bien era semejante a los demás en forma y sentidos físicos, era también diferente en cuanto a su modo de captar la realidad circundante y el uso de sus "otras" facultades naturales.
La escuela cumplió su misión al instruirle en las bases primarias para fortalecer su personalidad y a la vez, cubrirle con el caparazón del engaño y las teorías, las que no quiso aceptar cuando pretendieron erigirse como axiomas indiscutibles, en las primeras clases del ciclo secundario, que originó una rebeldía tal que muchas veces puso en jaque a sus profesores, y llegó hasta el abandono y expulsión de tales clases, dedicándose a la vida contemplativa, a los largos paseos, a reflexiones y meditaciones precoces para sus tiernos estudios y primeras investigaciones ocultistas.
Fue iniciado en los misterios de la sexualidad trascendental a los trece años de edad.
Sin embargo, su vida transcurrió dentro de la normalidad, pero con un constante batallar muy opuesto al de los buscadores de la verdad que desean percibir siquiera un poquito de la grandiosidad de la creación y de la presencia divinas.
El joven Juan, no quiso nunca ser víctima de experiencias indeseadas y accidentes paranormales e involuntarios arrebatos místicos, por lo que rechazó completamente toda manifestación ajena a sus cinco sentidos, viviendo intensamente la vida incluso más allá del común de la gente, pero, sin perder la llave que le abría el cofre de los misterios, hasta que un 18 de enero de 1980, fecha en la que tuvo que aprender la primera lección de la Iniciación: EL AMOR.
Su encuentro a plena consciencia con sus Maestros: Los V. L. MICHAEL Y SAMAEL.
Reencuentro con su propia realidad y con su propia vida, inicio de renunciaciones, y comienzo de realizaciones.
Recibe del V.L. MICHAEL, la soberana orden de Fundar nuevamente la Orden Rosacruz.
Es aceptado con fuego y luz en el Supremo Sacerdocio de la ORDEN DE MELQUISEDEC, y por el propio V.L. MELQUISEDEC.
Recapitulación de su propia obra. Guía exhaustiva y constante del Gurú V.L. SAMAEL, y como consecuencia ve luz el libro primero: "La Orden Rosacruz, el Orden de Melquisedec".
Nuevas renunciaciones, muerte del pasado.
Fundada la Orden Rosacruz, encuentra a María, otras renunciaciones y sacrificios.
En la soledad del antiguo Thornanry, luego de epopéyica victoria, recibe el abrazo de Luz y el beso de Fuego del maravilloso ÁNGEL DE LA MUERTE quien se aleja de Juan sin llevarse la vida.
Nace a la vida el libro: Bodas Alquímicas.
En un mundo violento por naturaleza, funda el vehículo de expresión política de la Gran Logia Blanca: Acción Humanista Revolucionaria con su lema de NO A LA VIOLENCIA.
La siembra humanista de la no violencia continúa y es postulado candidato a la Presidencia de la República.
Exilio voluntario o el inútil sacrificio de vidas jóvenes en represalia y venganza por la voz humanista, imponen nuevas renunciaciones.
Juan y María con la cruz sobre sus hombros, una rosa en los corazones y sin un centavo en las bolsas, inician su éxodo hacia el norte de Luz.
Salta de la ígnea fragua el libro de fuego: El Evangelio de Melquisedec. Nace del mismo ígneo volcán: Imaginación Creadora…Y en algún lugar de la geografía de Nuestra América, se desplaza calladamente un hombre, unas veces rumbo a las estrellas, otras a la profundidad ígnea del Templo de Melquisedec ahí en el Sol que ilumina el interior de nuestra esfera azul, y también hacia dentro, muy dentro de esos maravillosos cosmos que se proyectan más allá de lo infinito... si... ¡Ahí va Juan...! ¡Ahí va Om Yeowams Om...!
LOS EDITORES
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